viernes, 2 de noviembre de 2012

@AristeguiOnline y su lesbianismo

Esta es una de las dos cartas que nos han llegado denunciando el abuso de Carmen Aristegui a jovencitas. Cabe señalar que respetamos las preferencias bisexuales u homosexuales de esta mujer. Pero quedamos a las disposición de cualquier aclaración, y si no, es que es verdad; el que calla otorga. Aquí la carta integra que nos llegó:





A mí me acosó Carmen Aristegui
Cuando era estudiante de periodismo del 3er semestre, pedí la oportunidad de hacer mis prácticas en W Radio en el año 2007, ahí nos tocó reportear por turnos y quedarnos en ocasiones por la noche. 

Un día, después de una cansada jornada corriendo y viendo personas e investigando algo que se me había encomendado  conociendo cientos de historias terribles de violencia y pobreza; llegue´en la noche a la "W", donde colaboraba, era un lugar en el que los mismos compañeros y hasta los que llegaban para ser entrevistados nos acosan sexualmente, haciendo comentarios machistas o con miradas mañosas a nuestro cuerpo, nalgas o pechos. Algo que sufrimos la mayoría de mujeres.

Al llegar, Carmen Aristegui, me llamó a su oficina, ahí no había nadie más para “llegarme” y "presionarme" como se dice, o se le llama a una práctica casi militar que se utiliza para atemorizarte y preguntarte bajo hostigamiento para ver cuánto sabes  es como demuestran los “superiores” que pueden afectarte si no contestas en segundos pregunta tras pregunta como si fuera una tortura. 

El caso es que yo, llegué ahí  empezó a preguntarme sobre cuestiones académicas y paró diciendo que le gusto. A mi me dio risa y me sonrojé, no es que me gustara, solo no supe que decir y por miedo a decir algo, hice como si no había oído.

Se me acercó y me tomó de la mano y me dijo que le gustaba, no le respondí y pensé: “¿Qué debo hacer?” y no supe, entonces colocó mi mano en su vagina, se abrió la blusa, se sacó un sen, me hizo tocárselo, se lo toqué con asco, miedo y parálisis, logré tomar fuerzas y salí.

Al rato llegó donde estaba con el resto de los compañeros y empecé a notar, como ella ya empezaría a reprimirme pues me mandó a hacer una entrevista, que en otro momento, seguro no me pediría, es decir que ella empezó a castigarme por haberme salido. Este fue el pan de cada día, hasta que decidí salirme. Después supe que había renunciado a la estación al siguiente año.

No es la primera vez que pasa eso con ella, ha acosado a muchas jovencitas, el problema es que ella asegura que tiene un prestigio y que nadie creería nada si es que la denunciamos. 

Después de investigar, supe que no fui la única, y que ha tenido cuatro amantes, mujeres jóvenes, con las que ha tenido relaciones algo duraderas, ellas han aceptado por la necesidad o la ambición de tener une espacio en los medios de 
comunicación . 

Alejandra. H.J.